Soy Ana Azul, y la cerámica siempre ha formado parte de mi vida. Nací y crecí en un taller, viendo a mi padre dar forma al barro con su toque personal y a mi madre transformar las piezas con colores y detalles, como si de una pintora se tratase. Entre cuerdas secas, sobrecubiertas y diseños vibrantes, aprendí sin darme cuenta lo que significa crear con las manos.
Pero nunca pensé que este sería mi camino. Mi padre solía decirme: "Estudia algo seguro, la cerámica es un mundo de altibajos." Y así lo hice. Buscando algo creativo y con impacto, estudié para ser profesora de educación física. Sin embargo, al adentrarme en ese mundo, sentí que tenía demasiadas barreras. Como forma de desconexión, volví al taller de mi padre, exploré sin expectativas y descubrí un universo sin límites.
Decidí dejarlo todo para aprender y dedicarme por completo a la cerámica. Estudié en la Escuela de Arte San Telmo de Málaga, donde, a pesar de haber crecido rodeada de barro, se abrió ante mí un campo infinito de técnicas y procesos. Durante esos años, experimenté con nuevos materiales y enfoques, ampliando mi visión. Además, continué formándome con cursos e inmersiones cerámicas, aprendiendo de la Escuela de Cerámica de la Bisbal y explorando técnicas japonesas como el raku.
Hoy, cada pieza que creo es el resultado de ese camino. Azul Cerámica es la fusión de todo lo aprendido y heredado, de la tradición que me rodeó desde pequeña y de mi propia manera de entender este oficio.
Soy Ana Azul, ceramista y creadora de piezas únicas. Mi trabajo busca ir más allá de la funcionalidad: quiero que cada objeto aporte algo más, que sorprenda, que haga disfrutar. Así como yo me dejo inspirar por lo que veo y hago, quiero que quienes usen mis piezas también encuentren en ellas un pequeño momento de conexión y belleza en su día a día.
Soy Ana Azul, ceramista y creadora de piezas únicas. Mi trabajo busca ir más allá de la funcionalidad: quiero que cada objeto aporte algo más, que sorprenda, que haga disfrutar. Así como yo me dejo inspirar por lo que veo y hago, quiero que quienes usen mis piezas también encuentren en ellas un pequeño momento de conexión y belleza en su día a día.